The New World

"until, in God's good time, the New World, with all its power and might, steps forth to the rescue and the liberation of the old."

Así terminaba Wiston Churchill su famoso discurso que sucedió a la catrastrófica derrota de Dunkerque. Sobre que significa "New World" en ese contexto se ha hablado mucho. Algunos dicen que sólo intentaba pedir ayuda a Estados Unidos, reacios a intervenir en la guerra en ese momento, otros, como yo en este caso, prefieren usar esa expresión como una petición de ayuda, no hacia un país, sino hacia las colonias británicas en ese momento, y a las que ya habían dejado de serlo.

En aquel día  Wiston Churchill, el más orgulloso de entre el orgulloso pueblo de Gran Bretaña, volvió su mirada hacia las colonias y dijo alto y claro: necesitamos vuestra ayuda, sois nuestra única esperanza, perdón.

Ahora pienso, ¿qué sería de España si un Churchill nos gobernase ahora? 

Hoy, centrada nuestra atención en la cumbre Iberoamericana de Cádiz, no cabe más que pensar, mientras se escucha a todos los dirigentes de aquellos países que un día saqueamos y masacramos decirnos, una y otra vez, "no vais por buen camino, nosotros sólo conseguimos mejorar cuando dejamos de seguir a ese pastor malvado" que aquí hace falta un Churchill. 

Un hombre que se trague el orgullo y acepte la derrota, que acepte que nuestros, ya famosos, 5 millones no nos coloca en una posición mejor que la que tenía aquel día el ya no tan joven londinense. Un hombre que  abra sus brazos hacia la patria grande, que escuche a Ecuador, que escuche a Argentina, que escuche a Brasil y a Venezuela, y que olvide de una vez por todas ese estúpido sentimiento europeo de superioridad, cuando para más INRI, nosotros nunca hemos sido Europa, como tanto Europa, como la derecha española, se han encargado de proclamar una y mil veces.

No puedo más que incrustar a Correa.

Un saludo