sábado, 23 de febrero de 2013

El cuento de la lechera y la dación en pago

Todos conocemos el cuento de la lechera, una pobre mujer que construye un futuro sobre una serie de posibilidades que pueden o no realizarse, y que complementa ese "más vale pájaro en mano que ciento volando a la perfección"

No tengo muy claro porqué, pero hoy para mi la relación entre esa lechera y el "vivir por encima de las posibilidades" se me antoja de sinonimia contextual, vivir con un dinero que no tienes o que no es tuyo, eso que al parecer es nuestro deporte favorito según dicen desde los palcos de la pulcritud.
El segundo paso es la famosa dación en pago que, tras admitir a trámite, el gobierno ha anunciado que no tramitará, o no seriamente, pues "perjudicaría demasiado al sistema crediticio español y a nuestra credibilidad en los mercados".

Yo personalmente sigo sin ponerle cara a los mercados y no se como puede algo perjudicar nuestra credibilidad un poco más (quizás que el rey se fuese a cazar unicornios) pero no deja de llamarme la atención esa "España de dos velocidades" de la que ya he hablado alguna vez.

¿Cual es el problema de la dación en pago? ¿Por qué da tanto miedo a nuestros bancos que se formule legalmente?

La dación en pago tiene dos efectos adversos para el banco. El primero de ellos se debe a cambios en el precio de las cosas; puesto que el coste de los bienes y servicios no queda determinado por su valor sino por la ley de oferta y demanda, una casa que costó comprar X puede ahora costar solamente X/4 lo que obviamente haría al banco perder mucho dinero si aceptase la dación en pago; estarías pagando con X/4 una deuda cuatro veces mayor. A fin de llegar al siguiente punto pasemos por alto el absurdo de que el valor de ciertas cosas este sujeto a variaciones e intentemos no mentar las propuestas de Marx sobre el valor del trabajo que se nos espantan los liberales.

El segundo caso, y en mi opinión el que más miedo produce en las carnes de nuestros desgraciados banqueros es el cuento de la lechera. Vivir por encima de tus posibilidades está mal según quien seas: si tu te gastas un dinero que aún no tienes eres un despilfarrador, si un banco se gasta o vende los intereses de tu hipoteca el día en que firmas el contrato, entonces no pasa nada.

Y es que las cosas son así, si tu no puedes pagar lo que debes, estás dando mala imagen pero si ellos comercian con cosas que no existen, no pasa nada.

La gota final llega cuando avisan "una ley que regule la dación en pago podría complicar mucho el flujo de crédito" Cómo diría Joaquín Reyes: ¿De que mierda estamos hablando? ¿De que flujo de crédito? En un país donde el flujo de crédito no existe ¿cómo se puede resentir el flujo de crédito?

En fin, no habrá dación en pago, cómo tampoco veremos abdicación del rey ni dimisión del gobierno, pero sentíos afortunados, en el año 2061 el cometa Halley volverá a pasar cerca de la Tierra, algo que pasa cada 76 años, mucho más amenudo de lo que abdica un rey o dimite un fascista, pero singular al fin y al cabo.

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